Grabado al aguafuerte y aguatinta. Tamaño de la plancha: 50 x 33 cm
Grabado en técnica directa. Tamaño de la plancha: 50 x 33
Cerograbado, aguafuerte y aguatinta. Tamaño de la plancha: 33 x 24 cm
Grabado al aguafuerte y aguatinta. Tamaño de la plancha: 50 x 33 cm
Fotopolimero sobre plancha solar Tamaño plancha: 29 x 21 cm
Fotopolimero sobre plancha de relieve. Tamaño de la plancha: 29 x 21 cm
Fotopolímero. Tamaño de la plancha: 28 x 25 cm
Grabado al aguafuerte y transferencia de fotocopia. Tamaño de la plancha: 33 x 24 cm
Fotopolimero. Tamaño de la plancha: 18 x 13 cm
“¿Quién es el que, con un amor sobrehumano, me hace el obsequio de esta alucinación?.” Unica Zürn.
Algunas veces, la obra de arte funciona como un regalo bomba:
El artista, sonriendo extrañamente, con la cara de quien se quiere deshacer de algo sin que nadie lo note, ofrece su trabajo, envuelto con un papel brillante y un lazo negro. Los espectadores, más o menos agradecidos, lo reciben como si se tratase de un obsequio encantador. Pero una vez abierto, para bien o para mal, es rebelado el exceso de confianza. Y es que, bajo ese envoltorio tan bello, hay dentro un diminuto y silencioso artefacto que estalla contra quien lo abre.
Éste es mi pensamiento acerca de la siguiente serie de grabados. Pues, dañino o no, todo intento de obra artística debe de ser un regalo que reviente, al menos por un momento, nuestra terrible realidad.
Elisa Miravalles.